El tratamiento consiste en la implantación de pigmentos a nivel dérmico para dotar de color y forma a diversas partes del cuerpo.
Es un tratamiento perfecto para realizar un efecto de maquillaje estético, elegante y duradero. También es muy solicitado como una herramienta en el tratamiento correctivo para disimular imperfecciones como cicatrices, enfermedades que provocan la pérdida de pigmentación en la piel como vitíligo, reconstrucción de las areolas.
Tiene una duración aproximada de 6 meses a 6 años, lo cuál dependerá de la zona corporal tratada, características cutáneas de la persona, así como de su estilo de vida, cambios hormonales y exposición solar.